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ENERGÍA

De la energía se deriva todo lo que son procesos energéticos, sea a nivel vital, sea a nivel psicológico: la voluntad, el impulso de vivir, la capacidad combativa. Todo eso son expre-siones directas del aspecto energía.


INTELIGENCIA

De la inteligencia se deriva todo lo que son modos de conocimiento; desde la percepción de los sentidos a lo que es el proceso de relacionar datos, de abstraer, juzgar, intuir. Es decir, toda la gama de conocimientos.

AFECTIVIDAD

De la que deriva toda nuestra gama de sentir. En el aspecto biológico placer-displacer; en lo psicologico, amistad, afecto, alegría, amor. En el espiritual se manifiesta como amor espiritual, sentimiento de belleza, de armonía, beatitud.

 

 

Aunque en la vida se puedan tener momentos de plenitud, cada vez que uno vive una experiencia muy grata, que se cumple un deseo, que se supera una crisis, esa satisfac-ción, esas plenitudes que se pueden vivir son siempre temporales. En cambio, la plenitud que viene como consecuencia del desarrollo real del propio potencial es una plenitud irreversible, es una plenitud que permanece. En este sentido, existencialmente hablando, la única plenitud es la resultante de la total actualización del potencial.

La materia prima de la vida

La existencia concreta está hecha sólo de cualidades positivas (energía, inteligencia y amor-felicidad). No hay otra cosa. Es decir que no hay en el ser humano nada que sea negativo; sólo hay cualidades, no hay defec-tos. Las cualidades son substanciales. Los defectos no son substancia. Defecto es la menor presencia de una cualidad; es déficit, déficit de actualización.

Generalmente se tiene la idea de que el ser humano es un complejo que está hecho de cualidades y defectos, como si fuéramos dos cosas.

Todo lo que llamamos defectos no son más que cualidades que están insuficientemente desarrolladas.  Lo cual hace que, si esto se llega a intuir realmente, se pase de la visión dualista de dos principios que se enfrentan, a una visión no dualista, a una visión de unidad fundamental.

El único modo que hay para luchar contra la oscuridad es haciendo que entre más luz.

 

 

 

HACIA EL YO EXPERIENCIA

LO EXTERIOR.

VISION

 

Del exterior me vienen todos los alimentos, pero es mi hambre y mi capacidad de asimilar, la que me permitirá utilizarlos.

Del exterior me viene información, pero es mi inteligencia la que entiende, maneja y asimila el significado de la información.

El significado nunca me viene del exterior. Nunca la comprensión me viene del exterior. Del exterior me vienen datos, estímulos, sugerencias, pero el acto de comprensión es siempre un acto que va de dentro a fuera, es un acto de actualización.
Del exterior me viene estímulos afectivos, pero es mi capacidad de responder con gozo, con felicidad a las situaciones, mi capa-cidad de amar, la que aplicándose sobre esos estímulos hace que mi vida afectiva crezca.Mientras yo espere que el exterior me llene de satisfacción, me llene de amor, estaré esperando toda la vida en vano. Lo único que me desarrolla es ese acto por el cual yo ejercito mi potencial.

En el aspecto inteligencia ocurre exactamente igual: mi capacidad de ver y comprender es el resultado del ejercitamiento activo que yo hago en actos particulares de comprender. Pueden llenarme la cabeza con la información de todas las bibliotecas del mundo y esto no me hará más inteligente. La inteligencia es la capacidad de ver, de comprender, de penetrar la verdad, el sentido o el sign-ficado de las cosas. Esto es un acto activo de mi propia capacidad central y sólo en la medida en que la ejercito se actualiza, se desarrolla. 
El desarrollo sólo se produce como respuesta mía a las situa-ciones, siempre es un proceso que va de dentro a fuera. No es lo de fuera lo que me desarrolla sino mi respuesta interior a lo de fuera.
Así pues, nuestra vida es un proceso por el cual nosotros mismos somos los creadores de nuestra propia plenitud. No puedo vivir otra plenitud que la que es consecuente a mi capacidad de comprender, de amar y de actuar. En la medida que ejercito esto, en esa misma medida desarrollo mi potencial.